101 CAFÉ carrera de Ingeniero de Caminos le nombraron delegado de Dragados para Andalucía Occidental, se vino a vivir a Algeciras y conoció al Coronel Joseph McMicking, quien le contó el proyecto en el que trabajaba para la familia Zóbel. A mi padre le gustó mucho y, unos años después, ya en los 70, regresó a la zona y desde entonces estamos aquí”. De hecho, tal y como nos cuenta su hijo, Juan Miguel Villar Mir tuvo un papel fundamental en la definitiva expansión de Sotogrande. “Mi padre le comentó al Coronel McMicking que, en su opinión, su proyecto no podría ser sostenible financieramente a largo plazo sólo con unas cuantas docenas de viviendas unifamiliares. Había que abrir Sotogrande a más clientes potenciales y, para eso, le sugirió al Coronel McMicking comprar los terrenos al otro lado del río Guadiaro Eso permitió desarrollar los Apartamentos Playa, el Puerto Deportivo y la Marina. El tiempo, creo que modestamente, ha confirmado que mi padre tenía razón. Sotogrande debía crecer y lo ha hecho sin perder su idea original. Al contrario que en otras localidades de la Costa del Sol, aquí ni hay ni habrá construcciones masivas, porque tiene un urbanismo previsto y bien planificado para seguir manteniendo su esencia”. Una esencia que también han podido disfrutar los Villar Mir como residentes habituales. “Tengo magníficos recuerdos con mi familia y amigos cuando veníamos de vacaciones. Mi primera excursión larga en moto a los 13 años con Alfredo Melián; los partidos de polo en la playa; las primeras regatas a vela en catamarán, los campeonatos de frontón filipino (que también se los debemos a la familia Zóbel), jugando con Paco Rodríguez y ganando algún campeonato a Miguel Preysler, aunque él también nos ganó otros”, las primeras escapadas nocturnas a la discoteca Óscar, relata nuestro protagonista que también se emociona con un recuerdo más reciente, el de la boda de su hija aquí en Sotogrande. A todo esto, se añade además la larga trayectoria de JuanVillarMir al frente de Puerto Sotogrande, en concreto desde 1989. “Desde entonces vengomás veces a trabajar quede vacaciones”, reconoce con una sonrisa. “Cuarenta años después Puerto Sotogrande sigue siendo la primera gran marina a la entrada del Mediterráneo, con unos 1.300 atraques y se ha convertido en un elemento fundamental de la vida en esta zona. Además de ser históricamente capital del golf y del polo, Sotogrande también es referente mundial en náutica deportiva, porque tenemos un entorno ideal para la navegación a vela y una marina reconocida a nivel internacional”. Otro rasgo característico de Puerto Sotogrande, con doce banderas azules consecutivas, es su compromiso con la sostenibilidad. “Llevamos muchos años con políticas medioambientales muy estrictas, siempre en primera línea de sostenibilidad. De hecho, vamos a ser uno de los primeros puertos con mayor porcentaje de consumo energético de origen fotovoltaico”. made the representative for Dragados in Western Andalusia, he set up home in Algeciras and met Colonel Joseph McMicking, who told him about the project he was working on for the Zóbel family. My father liked the sound of it and a few years later, in the seventies, he came back to the area and here we are to this day.” In fact, as his son says, Juan Miguel Villar Mir played an essential part in the ultimate expansion of Sotogrande. “My father mentioned to Colonel McMicking that, in his opinion, the project would not be financially viable in the long term with just a few dozen detached homes. It was necessary to open Sotogrande up to more potential clients and that’s why he suggested Colonel McMicking buy the land on the other side of the Guadiaro River. This made it possible to develop the Beach Apartments, the harbour and the marina. Time has, in my modest opinion, proved my father right. Sotogrande had to grow and has done so while retaining the original idea. Unlike other places on the Costa del Sol, there aren't and won't be any largescale building projects because the town planning has been stipulated and designed to maintain the essence”. An essence that the Villar Mir family have also been able to enjoy as residents. “I have wonderful memories of moments with my family and friends when we came on holidays. My first long ride on a motorbike with Alfredo Melián when I was 13; the polo matches on the beach; my first sailing regattas in a catamaran; the first pelota championships (another thing we owe to the Zóbel family) playing with Paco Rodríguez and beating Miguel Preysler to the trophy, although he did win others; and our first night-time outings to the Óscar disco,” says our protagonist, who cannot hide his emotions looking back on the recent wedding of his daughter here in Sotogrande. On top of all this, we cannot forget Juan Villar-Mir’s long career at the head of Puerto Sotogrande since 1989. “Since then, I have been coming more for work than for holidays,” he admits with a smile. “Forty years on, Puerto Sotogrande is still the first large marina at the gateway to the Mediterranean, boasting over 1,300 moorings and becoming a fundamental part of life in the area. Besides being the historic capital of golf and polo, Sotogrande is also a world leader in marine sports because it is the perfect spot for sailing and we have an internationally renowned marina”. Another characteristic feature of Puerto Sotogrande, awarded twelve consecutive blue flags, is its commitment to sustainability. “We have had very strict environmental policies in place for many years, always frontrunners in sustainability. Actually, we will be one of the leading harbours with the highest percentage of energy consumption from solar panels”.
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